¿CÓMO HABLAR EN PÚBLICO?
EL ORADOR Y SUS CUALIDADES
Hoy vengo hablaros sobre aspectos fundamentales que debemos tener en cuenta a la hora de preparar un discurso, exposición o simplemente hablar en público, voy a tratar una serie de aspectos que debemos perfeccionar, mejorar, limar, practicar siempre nosotros mismos como maestr@s y también saber transmitírselo a nuestro alumnado desde pequeños y no limitar su expresividad comunicativa.
Hoy en día la sociedad exige más en cómo hablar. Quien tiene un mensaje significativo y sabe hacerlo llegar, se hace notar y queda en la memoria de quienes le escuchan. Son muchos los que no logran presentarse y presentar acertadamente su mensaje, lo que piensan, sienten y quieren. Es fundamental que los educadores formemos a los más peques a desarrollar técnicas de expresión oral, hablar en público, ya que ellos son el futuro de nuestra sociedad, pero ¿estamos realmente preparados para ello?
En el mundo moderno, la gente no tiene la misma paciencia que había antes, somos más exigentes como espectadores y son escasas las personas que tienen la habilidad de hablar con fuerza, con poder de convencimiento y con alto nivel de influencia. Ralph Waldo Emerson ya decía “Todos los grandes oradores fueron primero malos oradores”. Uno no es innato, se va construyendo. Por lo tanto es tarea nuestra trabajar en ello.
Necesitamos comunicar con palabras adecuadas, con tono de voz apropiado, con el cuerpo y agregarle el trabajo con la mente y corazón para que nuestro mensaje educativo llegue tanto alumnos como padres. Todos estos aspectos en armonía hacen una comunicación poderosa, convincente, persuasiva, con influencia, atracción e impacto.
Cualidades principales:
1. Físicas: el buen vestir, la actitud mental positiva,
2. Intelectuales: memorización, imaginación, sensibilidad e iniciativa.
3. Morales: honradez, puntualidad, sinceridad, congruencia y lealtad.
4. Otras cualidades: Pronunciación, modulación, vocalización, dicción, colocación o Impostación, proyección, respiración, higiene y cuidado de la voz
La voz es el primer y principal instrumento de quien habla en público, y es importante que le dedique tiempo y esfuerzo a su desarrollo y aprovechamiento. De forma similar a un instrumento musical, requiere de un correcto manejo para que brinde toda la belleza y armonía de su expresión. Aprovechar las bondades de la voz equivale a ejecutar el mejor instrumento que posee un orador. Como educador que soy y somos, debemos cuidarla siempre ya que es nuestro medio transmisivo de conocimientos.
MANEJO DEL CUERPO Y EL ESPACIO
Hablar con seguridad, claridad, precisión y expresividad.
Seguridad: algunas de las recomendaciones por expertos son prepararse el contenido, la técnica y hacer práctica de ello.
Claridad: hay que atender los aspectos anteriormente hablados que son la modulación, proyección, dicción y colocación, de forma ordenada, para que así sea el mensaje claro.
Expresividad: atender a la intensidad, tono, velocidad y pausas. Tiene que existir un equilibrio entre todas ellas y dando notas de atención.
Posición, postura y desplazamiento.
Posición: donde podamos ver a todos y que todos nos vean. No esconderse. Una posición erguida, relajada, y estable, reflejará seguridad
Postura: evitar encorvamientos, posturas de afectación, posturas agresivas, no apoyarse sobre una pierna por mucho tiempo y tampoco abrirse mucho de piernas.
Desplazamiento: La falta de desplazamiento genera monotonía en la presentación y ayuda a que el público se aburra o se canse. Evitar balancearse, moverse de forma predecible/repetitiva, moverse sin detenerse, arrastrar pies por el suelo o mover pie nerviosamente.
El poder de la mirada.
La mirada es de gran importancia a la hora de establecer contacto con quienes nos escuchan y hay que aprovecharla. No puede ser descuidada, casual o desentendida, puesto que daría la impresión de que no tienes verdadero interés en quienes te escuchan. Todos interpretamos lo que percibimos, y una mirada inapropiada hará que los demás saquen conclusiones negativas sobre ti y sobre lo que les dices.
Debe ser activa, intencional, agradable y sincera, sin dureza, con afecto. El nivel de persuasión se incrementa cuando estableces un contacto sincero y directo con tu público. Evitar excluir personas con la mirada, de mirar demasiado el suelo o el techo. Esto les daría un mensaje psicológico que te perjudicaría: “No eres importante”; como no les prestarías atención, ellos no se sentirían obligados a prestártela a ti.
En resumen: mira a los ojos y de forma activa a todos, de manera agradable, y sin excluir a nadie o a ninguna zona. Conéctate amigablemente con quienes te escuchan, de este modo ellos también se motivarán a hacerlo.
La gesticulación
Usualmente hablamos de manera natural, con todas nuestras expresiones y gestos, sin pensar más que en el mensaje que estamos transmitiendo. Pero, ¿qué sucede al momento de hablar en público? elementos tan importantes como las manos y los brazos son de gran utilidad, las manos permite dos tipos de movimientos:
1.Expresivos: Su utilidad viene dada por la expresión de alguna emoción, impresión o sensación
2.Descriptivos: Se utilizan para señalar, apuntar, dibujar figuras en el aire, indicar tamaños y formas, entre otras.
Algunas recomendaciones importantes a la hora de hablar en público tienen que ver con que evites: paralizarlas, meterlas en los bolsillos, cruzarse de brazos, manos en la espalda, brazos en forma de jarra, la ojiva, postura del tiranosaurio, síndrome del brazo muerto, repetir gestos.
Recuerda, dale riqueza a la expresión corporal sin llegar a las exageraciones, a los gestos limitados o repetitivos, a los vicios que disminuyan o anulen tu capacidad expresiva
Manejo del cuerpo y el espacio
¿Sabías que la proxémica es la disciplina que estudia cómo gestionamos los espacios en nuestra interacción social, laboral y personal con otros individuos? Pues bien, la competencia proxémica permite a las personas crear un marco de interacción acorde con unas coordenadas espaciotemporales que expresan determinados significados y que, en ocasiones, obedecen a un complejo sistema de restricciones sociales que pueden observarse en relación con el sexo, la edad y la procedencia social y cultural de las personas.
Los espacios pueden ser:
Espacio íntimo
Espacio casual-personal
Espacio social-consultivo
Espacio público
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